Mírame en esta
circunstancia difícil en que se encuentra
mi vida y ten compasión de
mí.
Acepto tus insondables
designios, aunque no los
comprenda.
y que esta prueba,
lejos de separarme de ti,me haga experimentar,
con mayor plenitud, la omnipotencia de tu
amor que santifica y
salva.
HAGASE EN MÍ TU SANTA VOLUNTAD…
(Rafael López)